Mujer:
Siempre en la lozanía de este amor, surge como el agua de un manantial la felicidad más absoluta, la más digna, regia y natural, surge como el sol de una tarde que impone con toda su belleza, el idilio mejor concebido plenamente compenetrado a su vital majestad y presteza.
Surge de cada momento entre los dos, el anhelo vehemente de proclamar nuestra dicha como la más feliz, siempre tan bendecida por todo lo alto, en medio de un magno escenario reverdecido tan cerca de un mar y un cielo en su plenitud, dentro del cual se enmarca tan apacible nuestro paraíso.
Testigo silente de la fe de este idilio, que amalgama la ternura y la entrega decidida en medio de un amor eterno, amor fortalecido que nunca decae, ni desfallece, amor que se impone como nunca antes, a las dificultades por muy irremediables e inoportunas que parezcan.
Testigo de un amor como pocos, que no sucumbe, que se alimenta de una pasión hecha de la sed insaciable de nuestros intensos besos, de todos los abrazos en medio de la comprensión más intensa y de una ferviente vocación de encontrarnos para estar dichosamente unidos en medio de la más infinita inmensidad del amor.
Por ti,
Milmayos
Derechos Reservados
2022
Venezuela
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