Mujer:
Vivo
en cada segundo de mi Ser y de mi Estar pensando en tu inmensa belleza y en tu
muy merecida felicidad, vivo haciendo exégesis a la nobleza que engrandece la
majestad tan excelsa de tu alma, rosa perfumada y plena de la más vehemente
pasión.
Vida
bella, vida mía, tu entereza y preciosidad me otorga el prodigio de tanto
amarte. Cada instante inextinguible de mi vida yo estoy siempre compelido
amorosamente a amarte con un inmenso denuedo y con la más sentida e
inmarchitable veneración.
Siempre
te ama la soñadora obertura de mis ojos, mi corazón late la composición más
lírica, firme y musical para ti, mujer, la protagonista de mis sueños, todo mi
Ser te ama, por eso eres y serás el más apacible, hermoso, invaluable y
delicado tesoro.
Por
eso, no existe entre los dos las distancias, las querellas, ni el azar, ni los
enojos, sino la firme, muy profunda y romántica determinación de hacerte
dichosa y de pronunciar cada día de mi existencia: ¡Linda mía y bella,
eternamente, ... yo te adoro!
Tuyo,
Milmayos
Derechos Reservados
2021
Venezuela
Presiosa poesía donde reyna el amor.
ResponderEliminar