LA POESÍA Y LOS NIÑOS

LA POESÍA Y LOS NIÑOS.

    La poesía es un despertar de nuestra sensibilidad y creatividad para comprender y expresar el mundo en su belleza, cambio y desarrollo.

    Para el niño la poesía, así entendida; al igual que la ternura, la espontaneidad, la curiosidad, la imaginación, la fantasía, el deseo de conocer el mundo que le rodea, y el sentido critico; es una actitud hacia la vida.

    Actitud que junto a las demás va perdiendo en la medida que va creciendo y se va haciendo hombres.

    Nosotros y la sociedad en general, le vamos inculcando, casi imponiendo, otros valores y maneras de entender el mundo, desplazando las de él, por considerarlas inapropiadas para un “adulto”. La espiritualidad casi perfecta en el niño, va sediendo terreno, para la materialidad que le transmitimos repetidas veces. Un ejemplo le decimos que estudien mucho para que el día de mañana tenga los casas, los carros, las motos, los equipos eléctricos y electrónicos que quiera acumular, lo que le hará feliz. Si no se lo decimos nosotros porque entendemos  que  esa no es la razón de la vida, se lo inoculan subliminalmente los muchos programas y propagandas que para tal fin fueron preparadas y llegan fluidamente a millares de niños y adolecentes a través de la televisión, la radio, la prensa, etc.

    Es importante que los padres estén claros y atento a ese asunto. No podemos  permitir que esas formas de vida  cada vez más materiales que tienen sus bases en la codicia, el egoísmo y la competencia; acaben con la bondad, el espiritud de cooperación y la sensabilidad de esos seres que Venezuela y el mundo necesitan.

    Una manera de estar en guardia ante esta situación es mantener al niño en contacto perenne con el Arte, El Deporte, El conocimiento, La Ciencia y La Cultura.

   

Cuando de Arte se trata, una buena alternativa, entre otras, no lo olvide, es La Poesía.

                              MILMAYOS

 Poesía:

   Enseñanza y Cariño

   Un niño... eres un universo

   de luz, alegría y belleza;

   toda la felicidad del mundo

   se esconde en tí:

   El presente, el povenir de mi país;

   la mejor canción

   cuando ríes;

   la mejor esperanza,

   cuando creces;

   la paz del mundo,

   cuando rezas;

   y el amor más grande,

   cuando con ternura a estudiar comienza

                                   MILMAYOS