Le ruego al destino

Mujer:
Le ruego al destino que podamos estar tan juntos que nuestros sueños sean los mismos del amor más fiel. Un amor radiante y ferviente como el forjado solo por la más intensa y fecunda conjunción del sol, la brisa, el cielo y el mar.

Para que nuestros anhelos se hagan realidad, gracias a la magia de la más amorosa luna, placida como la de miel. Una relación como un idilio hecho para vivir eternamente, una y más vidas, muy juntos, sin dejarnos nunca de amar.

Con la pasión más sincera como la de una pleamar, con perennes y dulces besos, como la poesía más fidedigna: piel a piel. Como esos amores que nacen del manantial de un romántico y muy bendecido idilio, que mana, sin cesar.

Que a nuestras vidas impregnadas de felicidad, nunca, nunca nos alcance el cardo, el abrojo y los estragos tan amigos de la hiel; que nuestro amor sea eterno e inconmensurable como esos que son inmunes a la intriga y al más hondo mal.
Tuyo,

Milmayos

El amor es poesía