Tú

Mujer:

Tú, eres este eterno amor que como un ángel a mi alma llegó, tú mis cartas, tú mi luna, mi alma absorta, poetizada y moruna; tú, mis flautas, el sentarme en una silla, el leer en tus ojos mis fantasías, una a una. Tú mis ansías, mis poemas desde la primera hasta la última. Tú mi ciencia, tú mi esencia, mi causa apasionada, humanística y romántica; tú y yo, en "un nosotros" amoroso y único, tú y yo, en una unión, siempre, como ninguna.
MILMAYOS

Pasión sincera

Mujer:

Eres un muy hermoso y muy enamorado poema, en el que se cuecen con dulzura el sol y los besos en las playas de palmeras. Eres, de las rosas la belleza y la mismísima pasión sincera, el oasis más elocuente, el torrente de sangre que pasa ardiente por mis venas. Eres extremadamente bella, alma buena y siempre la bondad que por el bien se esmera. 

MILMAYOS

El rubí de un tesoro

Mujer:

Eres el rubí de un tesoro que no alcanza a tener el universo en general, pero si la inmensa belleza de tus ojos. Eres el encanto majestuoso que enciende la luz del sol y también la de los nidos, con tu forma de hablar y de recitar lo que no puede embrujar el oro, ni codificar la sed y ni extinguir el enojo. Eres princesa, el elixir ceremonial de las aves y de los ángeles. En ti vive lo inmensamente equinoccial de un pedestal altamente ennoblecido y sin abrojos; cuando te hablan mis palabras amorosas y gentiles te dan un beso en tu alma y otro en tus labios rojos. 

MILMAYOS

Amorosa brasa

Mujer:
Siempre mi amor te ama, te sueña, te acaricia y te abraza, siempre te ha hecho, como en los cuentos de hadas, románticas carrozas a partir de muy nobles calabazas, siempre, siempre mi amor es y será para el tuyo, una amorosa brasa, en el que se cuece con dulzura la cálida pasión, el amor invencible, los profundos besos y para siempre, nuestro perfecto idilio con la mejor esperanza.
MILMAYOS

Más poeta que nunca

Mujer:
Lindo es el mundo y es único su perfume de campo fresco y de jazmín, desde, que por motivos de la vida, yo a ti te conocí. Mis ansías, mi filosofía y mi mirada se fijaron en ti. Y ande por la vida, más poeta que nunca, siempre, siempre, ... enamorado de ti.
MILMAYOS

La naturaleza depurada de la miel

Mujer:
Nada en el mundo, como la dicha y la fresca calidez que me deja en mis labios los besos con que condecoro la superficie total de tu piel. El cantar tu nombre con solo pronunciarlo porque posee un universo tan honrado y tan dulce como la naturaleza depurada de la miel. Nada como alabar en un homenaje diario la amabilidad de tu nobleza y la proactividad de tu ser, pronunciar en cada verso tu nombre que me sabe a leche, turrón y nuez. Amarte con vehemencia sin dejar nunca a un lado el verdadero amor que nos une, siempre una y otra vez.
MILMAYOS

Eres rosa roja

Mujer:

Eres como esa bella canción de amor que nunca queremos dejar de oír, eres como esa inolvidable poesía que alienta al corazón y a todo romántico jardín, eres esa rosa roja tan dulce que nos hace evocar los mejores momentos, con tan plenos recuerdos, eres el motivo de toda mi alegría, de todo emprendimiento, de toda mi felicidad y un verdadero himno de amor y el mensaje de toda navidad. Mujer, eres mi inspiración y nunca, nunca te dejaré de soñar.
Atte.
MILMAYOS

Floricultor atento

Mujer:

Gracias princesa por apoyar con tu amor mi arte, gracias por ayudarme a tallarle al bien un estandarte. Gracias amada, en el perfume de tu piel consigo ser el más feliz. La poesía de tu mirada es la más dulce obra de arte, que con dulzura y afecto me lleva por los mundos a felicitarte y me convierte para siempre en el floricultor atento de las rosas y los geranios de tu jardín.
MILMAYOS

Poesía:

Mujer:

Siempre te ama, intensamente mi corazón, siempre con el fervor y la delicia que derrama en su hermoso vuelo el ruiseñor, siempre con el esplendor con que hablan las rosas cuando exhalan en su perfume, lo inimaginablemente bendecido por Dios.

Siempre, siempre con el más sublime y vigoroso amor, eternamente con las fervorosas, angelicales y mágicas notas musicales que musitadas conducen sin ninguna distancia física ni amorosa, a la muy noble, encantada y siempre exacta dulzura de tu voz.

MILMAYOS

Poesías para el amor

 Poesías para el amor

... eres la magia encantadora de un mar pincelado de una acuarela azul,

el espléndido encuentro de lo mejor de la noche del norte con la del sur,

el vuelo que despliega con su romanticismo, … solo un momento así,

ese solemne plenilunio cuya insigne inmensidad, no es nunca tal … sin tí.

MILMAYOS 

Insigne idilio

Mujer:
Es grato saber que en todo el mundo alguien como Usted, tan sumamente hermoso existe, siempre estás conmigo allí donde todo lo embellecen los románticos cisnes, en mis embelesados sueños un tesoro tan insustituible como Usted vive. 
Nuestro amor tan radiante que percibe un lago de ahíncos, fantasías y esmerados ensueños. Allí donde nuestros corazones se besan en un idilio apasionado, interminable y dulcemente insigne.
MILMAYOS

Ojos de rubíes

Mujer:

Existe en tu dulce mirar algo que no dejaré más nunca de amar: Tus lindos ojos que como rubíes o estrellas asomadas a tu balcón, me hacen suspirar. Existen por ti ángeles cantando serenata al fulgor de la luna y también a la necesidad de la paz, cuando el cielo observa como tus pasos se acercan raudos a los míos, cuando te vuelvo a besar.

MILMAYOS

Todo un éxito el recital de Milmayos, En Jamilena perteneciente a Andalucía, España

Todo un éxito resulto ayer, el recital poético de Milmayos realizado en Jamilena unos de los más hermosos pueblos de Andalucía, al sur de España. Casi dos horas dedicadas al exhibir sus mejores poemas.